octubre 07, 2009

¿A dónde iría? No podía pensar en un lugar de todo el planeta
que me llamara la atención. No había nada que deseara ver o
hacer. Porque, no importaba a dónde fuera, no estaría yendo a
algún lugar--- solo estaría escapando de uno...

abril 08, 2009

Si todo pereciera en el mundo, menos ella, yo seguiria existiendo..
mas el universo sería un extraño si todo lo demas sobreviviera y ella desapareciera..


.. cree que lo odio ..

abril 07, 2009

Alienación

La alienación es un fenómeno no ‘innato’ en las personas, de disposición psicológico-mental. Es una forma de adaptación, aceptación, separación y enajenamiento del individuo con su realidad.

Se distinguen:

  • A nivel individual: la alienación mental; perturbación mental, en la cual se puede presentar una anulación de la personalidad individual, confusión del raciocinio, excitación psicomotora, incoherencia del pensamiento, perplejidad, síntomas alucinatorios oniroides, o locura.
  • A nivel social: que va de la mano con la manipulación social, la aniquilación cultural, la dominación política y la opresión de la persona o colectivo alienado. Puede considerarse un entrenamiento, adiestramiento, adaptación, o derivación a un pensamiento o propósito que vuelve a las propiedades y aptitudes del hombre, en algo independiente de ellos mismos y que domina sobre ellos.

Alienación mental

La alienación es un proceso mediante el cual un individuo es aleccionado o autoalecciona a su subconsciente por un proceso morboso inintencionado, para llegar a creer algo, o fijar determinadas asociaciones mentales, generalmente con un propósito específico.

Algunos alienados hablan como "profesores" acerca de su área de interés, y pueden tener éxito en las ciencias y el arte. La alienación varía grandemente en severidad. Los casos más severos se caracterizan por una completa ausencia de relaciones sociales de por vida, comportamiento extremadamente repetitivo, no usual, auto dañino y agresivo.

Alienación endógena

La alienación endógena es un desorden del desarrollo del cerebro que deteriora su comunicación e interacción social causando un comportamiento frecuentemente, restringido y repetitivo. Puede clasificarse de diversas formas, como un desorden en el desarrollo neurológico o un desorden en el aparato psíquico. Algunas de sus características son: el comportamiento auto-estimulatorio, "extraños" movimientos, intereses intensos e inusuales, repetitividad de rutinas, apego a ciertos objetos, anulación de la personalidad individual, confusión del raciocinio, excitación psicomotora, incoherencia del pensamiento, perplejidad, síntomas alucinatorios oniroides, locura...

La alienación cuando es con un propósito especifico, puede llevarse a cabo a través de métodos de autohipnosis o autoafirmaciones constantes y repetitivas, y puede ser visto como una forma de lavado de cerebro autoinducido. El éxito está típicamente correlacionado con la persistencia de su uso y su duración temporal. La autosugestión también se puede considerar como una especie de rezo, autoexhortación, meditación, palabras de ánimo que el individuo se da a sí mismo, u otras actividades análogas.

La autosugestión se lleva a cabo generalmente bombardeando la mente de uno mismo con pensamientos repetitivos, positivos o negativos, hasta que permanecen en el subconsciente. Como procedimientos típicos para influenciar la propia mente a través de la autosugestión repetitiva, tenemos: visualizar las manifestaciones de una creencia, afirmarla en voz alta o con la "voz interna".

Tipos de alienación social

Se diferencian en sociología, cuatro tipos de alienación mediante los cuales el individuo o una colectividad transforman su conciencia hasta hacerla contradictoria con lo que debía esperarse de su condición:

  • Religiosa: resignación y justificación a la consagración a un dogma que frustra el desarrollo de la individualización de la conciencia humana.
  • Política: la pertenencia al Estado, o el consentimiento de la expoliación y la opresión por parte de un gobierno.
  • Económica: aquello que es producido por el hombre domina al hombre.
  • Consumista: compramos lo que la publicidad dicta, sin evaluación racional de la utilidad del producto, identificando la felicidad con el mero consumo.

En filosofía

La alienación si bien puede entenderse como una categoría relativa a disfunciones sociales del individuo, encuentra su mayor uso en la filosofía. También la alienación caracteriza la transformación de fenómenos y relaciones, cualesquiera que sean, en algo distinto de lo que en realidad son, la alteración y deformación, en la conciencia de los individuos, de sus auténticas relaciones de vida. Las fuentes de la idea de alienación pueden encontrarse también de manera simbólica en los representantes románticos de la Ilustración francesa (Rousseau) y alemana (Goethe, Schiller).

Estas ideas hicieron eco en la filosofía clásica alemana, pese a que en ella se hacía hincapié en otras cuestiones. Fue Hegel quien la utilizó por primera vez como negación, en relación con lo real.

Teoría marxista de la alienación

Marx, quien es deudor de la filosofía hegeliana, toma el término y lo aplica a la materialidad; en concreto a la explotación del proletariado y a las relaciones de propiedad privada. En su enfoque desde el marxismo al proceso de alienación, denominó alienación a las distorsiones que causaba la estructura de la sociedad capitalista en la naturaleza humana. Aunque era el actor el que padecía la alienación en la sociedad capitalista, Marx centró su análisis en las estructuras del capitalismo que causaban tal alienación.

Actualmente, como la mayoría de los conceptos filosóficos e instituciones sociales, la alienación -como categoría analítica- se encuentra en una crisis teórica debido a las profundas transformaciones sociales que han dado paso a la sociedad posmoderna.

enero 12, 2009

Teoría psicológica del color según Max Lüscher


Lüscher advierte con la práctica que existen cuatro colores primarios psicológicos los cuales se pueden dividir a su vez en dos pares: los colores heterónomos y los autónomos.

  • Los colores heterónomos son el Azul y el Amarillo, que representan la noche y el día respectivamente. Es decir el ciclo diario de luz y oscuridad. Estos son factores que gobiernan al hombre, es decir impuestos desde el medio ambiente, de afuera. Por lo tanto, el azul representa la tranquilidad, la pasividad, el reposo y el relajamiento general de la actividad metabólica. Por el contrario, el amarillo sugiere la luz del día, y representa la posibilidad de acción, de actividad, y una estimulación glandular. Sin embargo estos colores no obligan estas acciones, si no que las sugieren.
  • Los colores autónomos el Rojo y el Verde representan la actividad ataque-defensa del organismo. El rojo como acción externa dirigida a conquistar y adquirir. El verde como autoconservación, defenderse de los ataques y sobrevivir. Las acciones de defensa (Verde) y ataque (Rojo) están bajo el control del individuo se denominan colores autónomos o autorreguladores.

Max también formula en su teoría que la capacidad para distinguir los colores empieza con el contraste, es decir, colores claros y colores oscuros (de forma similar a Goethe). La diferenciación, su denominación y cualquier reacción estética hacia los colores son funciones de la corteza cerebral: el resultado del desarrollo y la educación más que una respuesta de reacción y del instinto. Por otra parte las funciones instintivas y reflejas obran en el cerebro medio, en función del contraste y afectan a los sistemas físicos y glandulares mediante la pituitaria.

- Psicología funcional

Las teorías que relacionan la elección cromática con la psicología de la personalidad reciben el nombre de psicología funcional. En el test de los colores (de Max Lüscher) la estructura de un color es constante, es decir siempre tiene el mismo “significado objetivo”. La “función”, por otra parte, es la actividad subjetiva hacia el color, y ésta varia de una persona a otra, y en ésta se basan las interpretaciones del test.

Los significados de los colores (tonos del test Lüscher de 8 colores) en resumen son:

- Azul (grisáceo): Representa la profundidad de sentimiento y es un color concéntrico, pasivo, asociativo, heterónomo, sensible, perceptivo, unificador. Sus aspectos afectivos son la tranquilidad, satisfacción, ternura, amor y afecto.

- Verde (con algo de azul): Representa la constancia de voluntad y es un color concéntrico, pasivo, defensivo, autónomo, cauteloso, posesivo, inmutable. Sus aspectos afectivos son la persistencia, autoafirmación, obstinación, y la autoestima.

- Rojo (con algo de amarillo, es decir anaranjado): Representa la fuerza de voluntad, y es excéntrico, activo, ofensor-agresivo, autónomo, locomotor, competitivo, eficiente. Sus aspectos afectivos son la apetencia, excitabilidad, autoridad y la sexualidad.

- Amarillo (saturado algo claro): Representa la espontaneidad y es excéntrico, activo, planificador, heterónomo, expansivo, ambicioso e inquisitivo. Sus aspectos afectivos son la variabilidad, la expectación, la originalidad, el regocijo.

- Gris (neutro psicológico, con mucho blanco): Representa la neutralidad y es separador, imparcial, aislante, ausente de compromiso.

- Marrón (algo claro): Representa la receptividad sensorial pasiva y es físico, receptor sensorial físico, seguro, sociable, dependiente.

- Negro: Representa el límite absoluto y es negación, renuncia, abandono, extremo, rechazo, extinción, temor.

- Violeta (rojizo): Representa la realización de los deseos y es irresponsable, intuitivo, sensible, inmaduro, afectivo, mágico.

La percepción objetiva del color es idéntica para todos. Sin embargo, hay quienes rechazan, sienten indiferencia o por el contrario simpatía o atracción. Dependiendo del estado anímico de ese momento, acepta o ignora una determinada sensación, por ejemplo la percepción de un color. Un color que se considera bonito se acepta, es decir, corresponde con su estado de ánimo. En la gran variedad de colores pueden reflejarse la cantidad de matices emocionales que existen. El color es por lo tanto, de forma similar a la música, un lenguaje de los sentimientos, altamente diferenciado. Los colores son sentimientos visualizados.

Por regla general:

  • Los azules se corresponden a los sentimientos (emociones), por lo tanto también a las relaciones sentimentales ya sean de amistad o conyugales.
  • Los verdes caracterizan el autocontrol, la fuerza de voluntad y la capacidad de disfrutar.
  • Los rojos representan la actividad, las iniciativas y reacciones ante los desafíos.
  • Los amarillos nos indican la actitud ante el futuro, los nuevos acontecimientos, las expectativas.